Cómo elegir una cortadora de carne

Hay varios factores a tener en cuenta a la hora de elegir una cortadora de carne:

• Tipos de productos a cortar
• Frecuencia de uso
• Altura de corte
• Tamaño de la hoja
• Velocidad de corte
• Espesor de corte
• Potencia
• Modo de funcionamiento (máquina manual frente a automática)

En primer lugar, debes tener en cuenta los tipos de productos que se van a cortar (carne fresca, embutidos, etc.), las dimensiones de estas piezas y la capacidad de producción deseada. Estas máquinas también pueden utilizarse para cortar pan, queso e incluso alimentos congelados, simplemente acoplando la cuchilla adecuada a la máquina.

Otro aspecto importante es la frecuencia de uso. Si buscas una cortadora para un uso intensivo, asegúrate de elegir una máquina fabricada con materiales duraderos y robustos.

Las dimensiones del producto determinarán la altura de corte que debe tener la máquina. En otras palabras, cuanto más grandes sean las piezas a cortar, más larga deberá ser la cuchilla.

En el caso de las cortadoras de cuchillas circulares, que son las más comunes, el diámetro de la cuchilla debe corresponder a la altura máxima de los productos a cortar. La mayoría de las cuchillas tienen entre 250 y 370 mm de diámetro, ya que estos tamaños te permiten procesar la mayoría de las piezas, sea cual sea tu capacidad de producción deseada. Si quieres utilizar la cortadora de fiambre para otros productos, tendrás que cambiar la cuchilla (cuchilla dentada para el pan, cuchilla antiadherente para el queso y los fiambres).

La velocidad de corte influye en la calidad del corte, es decir, cuantas más revoluciones por minuto haga la cuchilla, más uniforme será el corte. Ten en cuenta que una cuchilla más grande implica una velocidad de rotación menor. Sin embargo, las cortadoras eléctricas modernas vienen equipadas con potentes motores que les permiten hacer cortes precisos.

El grosor del corte es otro criterio al que prestar atención. La mayoría de las cortadoras de fiambres tienen un regulador de corte para ajustar el grosor del corte dentro de un determinado margen. Esto se indica en las características técnicas del equipo.

También hay que tener en cuenta la potencia de la máquina. Las cortadoras con más potencia son más rápidas y eficaces.

Por último, la elección entre una máquina manual y una automática dependerá de la frecuencia de uso y de la capacidad de producción requerida. Para un uso ocasional y/o pequeñas cantidades de producto, basta con una cortadora manual. Las máquinas automáticas se recomiendan para un uso frecuente y una productividad elevada.

Hay dos tipos de cortadoras: manuales y automáticas.

• Cortadoras manuales

Cortadora de fiambre manual Dadaux

Fueron las primeras máquinas que aparecieron en el mercado y se siguen utilizando hoy en día, sobre todo para cortar fiambres. Tienen un principio de funcionamiento bastante básico: el sistema de corte es movido por el operario mediante una manivela.

Ventajas: Las cortadoras manuales son económicas, ya que no necesitan electricidad para funcionar. También son versátiles, ya que pueden cortar tanto queso como embutidos sin tener que cambiar las cuchillas. También son más fáciles de limpiar que las cortadoras automáticas, ya que se pueden desmontar fácilmente para higienizar a fondo el equipo. También tienen la ventaja de ser compactas y silenciosas.

Inconveniente: este tipo de cortadoras no es recomendable para industrias y negocios que necesiten una gran capacidad de producción.

• Cortadoras automáticas

Cortadoras de fiambre automáticas FINOVA

Son eléctricas y tienen la mayor capacidad de producción, gracias sobre todo al carro cortador y al bombo automáticos. Algunos modelos totalmente automáticos te permiten programar el número exacto de lonchas que deseas, sin necesidad de intervención humana. También hay cortadoras semiautomáticas que combinan un carro automático con un mecanismo de ajuste manual.

Ventajas: Las cortadoras automáticas son más rápidas y tienen mejor rendimiento. Pueden cortar más tipos de carne que las cortadoras manuales (carne fresca, carne congelada, carne ablandada, etc.). Son compatibles con distintos tipos de cuchillas, por lo que puedes cortar una mayor variedad de alimentos, como pan, queso, pescado congelado, etc. Están equipadas con dispositivos de seguridad para reducir el riesgo de accidentes de los operarios.

Inconveniente: las máquinas automáticas son más caras que las manuales y están destinadas principalmente a los profesionales.

Las cortadoras pueden ser verticales o inclinadas, según la posición de la cuchilla.

• Cortadoras verticales

La cortadora vertical de ABM

En estos modelos, la cuchilla está perpendicular a la base de la cortadora. Con una mano, el operario tiene que empujar el producto contra la cuchilla y, con la otra, recortar la loncha y colocarla en el recipiente.

Ventajas: Las cortadoras verticales realizan un corte preciso y uniforme. Son más compactas que los modelos inclinados. Son adecuadas para cortar carne fresca.

Desventajas: El usuario tiene que ser cuidadoso durante la operación de corte, ya que tiene que recibir y colocar las lonchas manualmente, por lo que existe un mayor riesgo de cortes.

• Cortadoras inclinadas (por gravedad)

Cortadora inclinada manual MAINCA

En estos modelos, el sistema de corte (compuesto por cuchilla, carro y bandeja) está inclinado unos 45°. Como resultado, la gravedad empuja automáticamente el producto contra la bandeja del carro y luego contra la cuchilla, y las lonchas caen solas en el recipiente. Por eso estos modelos también se llaman cortadoras de fiambres por gravedad.

Ventajas: Son más fáciles de usar. Requieren menos esfuerzo del operario. Ofrecen mayor seguridad al usuario porque, debido a la gravedad, las lonchas caen directamente al recipiente sin que el operario tenga que recortarlas. Son adecuadas para cortar queso, fiambres, verduras y pan.

Inconveniente: son máquinas más grandes y, por tanto, ocupan más espacio que las cortadoras verticales.

La elección de una cortadora de alimentos también debe basarse en los siguientes criterios.

La ergonomía: es importante elegir un modelo que al usuario le resulte práctico y fácil de usar.

Las dimensiones del equipo y el espacio disponible: algunas cortadoras de fiambres son bastante grandes, así que antes de comprar un modelo, asegúrate de que tienes espacio suficiente para instalarlo y manejarlo.

La limpieza y mantenimiento: Si se realizan correctamente, prolongan la vida útil del aparato. La facilidad de limpieza y la frecuencia de mantenimiento varían según el modelo. Sin embargo, como estas operaciones son esenciales para garantizar unas condiciones de higiene adecuadas y mantener la precisión del corte, es aconsejable optar por una máquina fácil de limpiar y mantener.

La estabilidad: las máquinas pesadas son más estables y, por tanto, más seguras de usar.

La eficiencia energética: si quieres contribuir a una industria más sostenible, puedes optar por cortadoras de bajo consumo energético.