Qué filtro de aire comprimido elegir

Los filtros de aire comprimido se utilizan para eliminar los contaminantes del aire después de la compresión. Existen filtros de muchos tipos, tamaños y niveles de calidad. Decantarse por un filtro u otro dependerá del uso previsto, así como del tiempo que se pueda dedicar a su mantenimiento y de los requisitos del sistema.
El filtro adecuado en el compresor de aire industrial aumentará la eficiencia de la unidad y reducirá los costes de energía.

Ver filtros de aire comprimido

¿Por qué utilizar un filtro de aire comprimido?
Filtro regulador de la marca ewo

Los procesos industriales de alta precisión deben estar libres de contaminantes. Al igual que cuando se coloca un filtro de papel en la cafetera para obtener un café claro, los equipos neumáticos —válvula o cilindro— necesitan un filtro de aire comprimido para funcionar con aire libre de partículas, de aerosoles de aceite u otros lubricantes.

El aire comprimido aumenta la concentración por m3 de partículas en la atmósfera. El aire que sale del compresor contiene también otros contaminantes —polvo, óxido, aceite, agua, etc.—.

Para obtener un aire lo más puro posible, el circuito debe disponer de filtros que atrapen las impurezas antes de que contaminen el sistema.

La instalación del filtro de aire comprimido correcto evitará:
- Averías en los equipos, caros por lo general —corrosión de componentes metálicos, obstrucción de válvulas y tuberías, etc.—.
- La contaminación de productos —sobre todo en las industrias agroalimentaria, farmacéutica y médica—.
- La reducción del rendimiento o la vida útil de otros componentes de tratamiento del aire.
- Incendios.
- Tiempos de inactividad inesperados debido a las averías.
- La necesidad de un mantenimiento continuo de los equipos.
¿Cómo elegir un filtro de aire comprimido?
Antes de adquirir un filtro de aire comprimido, habrá que considerar:
- El tamaño de las partículas:
  
  Existen filtros universales estándar que eliminan partículas entre 5 y 40 micras.
  
  Asimismo, existen filtros que eliminan partículas de menos de 1 micra, en particular para los equipos de la industria farmacéutica y agroalimentaria.
- El caudal y las pérdidas de presión —o caídas de presión—:
  
  Existen filtros de diferentes tamaños dependiendo de los caudales, que pueden alcanzar los 1.700 Nm³/h.
  
  Se deberá estimar la pérdida de presión máxima con la que operará el filtro para determinar su tamaño.
  
  Será necesario consultar las curvas de las pérdidas de presión para el caudal en cuestión que prevé el fabricante.
  
  Para un funcionamiento óptimo, se recomienda evitar pérdidas de presión superiores a 5 psi.
- La temperatura:
  
  ¿A qué temperatura tendrá que funcionar el filtro de aire comprimido?
  
  Existen filtros de alto rendimiento para altas temperaturas —superiores a los 450 °C—.
- Las normas medioambientales:
  
  Los filtros de aire comprimido están sujetos a la norma ISO 8573, que prevé los estándares de la calidad del aire comprimido, independientemente de la ubicación del sistema de aire comprimido en el que se especifique o se mida el aire, con respecto a la presencia de partículas sólidas, de agua y de aceite.
  
  Esta norma también proporciona información general sobre contaminantes en sistemas de aire comprimido y se refiere a otras partes de la norma ISO 8573 con respecto a la medición de la pureza del aire comprimido o la especificación de los requisitos de pureza del aire comprimido.
  
  Por último, la ISO 8573-1:2010 identifica los contaminantes gaseosos y microbiológicos.
Consideraciones antes de elegir un filtro:
- El tamaño de las partículas.
- El caudal y las pérdidas de carga.
- La temperatura.
- Las normas aplicables.
¿Cuáles son los diferentes tipos de filtros de aire comprimido?

Filtro de partículas de la marca PIAB

Cada tipo de filtro permite eliminar un tipo de contaminante.

Filtros de partículas

Eliminan polvo, polen, etc.

Eliminan del aire el 99 % de las partículas con un diámetro de 0,3 micrómetros.

Filtro coalescente de la marca CAMOZZI AUTOMATION

Filtros coalescentes —o filtros de coalescencia—:

Se utilizan para retener líquidos, aerosoles de aceite y algunas partículas submicrónicas —hasta 0,01 micrones— suspendidas en el aire comprimido.

Aumentan la coalescencia de los líquidos. La coalescencia es el proceso por el cual las gotas finas de líquidos se fusionan para formar gotas más grandes bajo el efecto de una caída de presión. Cuando alcanzan un determinado tamaño, las gotas caen en una trampa de humedad para liberar así el aire de cualquier contaminante líquido. Se obtiene así un aire comprimido más seco y limpio.

Son fáciles de mantener porque no se obstruyen demasiado; si bien, no son efectivos para eliminar los vapores.

Existen filtros coalescentes en frío —que operan a 2 °C—. Estos filtros son más eficaces para filtrar la humedad.
Filtro de carbón activado de la marca JURA FILTRATION
- Filtros de carbón activado, o de vapor:
  - Se utilizan para eliminar olores e impurezas mediante un proceso de adsorción.
  - La adsorción es el proceso químico que permite que el filtro de carbón activado atraiga de forma natural los vapores de aceite.
  - Cabe decir que estos filtros son muy caros.
  - Requieren un filtro de polvo para evitar que pequeñas partículas de carbón se dispersen y contaminen el aire comprimido.
¿Por qué elegir un filtro regulador de presión?
Filtro regulador de la marca CAMOZZI AUTOMATION

Los filtros reguladores de presión proporcionan aire seco y limpio y con presión controlada.
- Se pueden instalar en compresores, como interruptores en líneas de aire comprimido y en dispositivos de aire comprimido.
- El ajuste continuo de la presión se realiza manualmente. Ya no habrá que preocuparse por las fluctuaciones de presión. Se podrá mantener el control total de la presión gracias a un manómetro, suministrado con el filtro regulador de presión.
¿Por qué elegir un filtro lubricador?
Los filtros de lubricación, además de limpiar el aire, también lo lubrican.
- Esto es posible gracias a un lubricador integrado en el filtro.
- Los filtros de lubricación son compactos, fáciles de instalar y económicos.
- En la mayoría de los casos, están equipados con un tanque de unos 150 ml. Esto representa una ventaja respecto de los métodos tradicionales de lubricación ya que permite ahorrar mucho tiempo.
- Se evitarán así daños en los equipo neumáticos causados por la humedad, el óxido o la cal.