Hay varios tipos de abrazadera.
Abrazadera de tornillo sin fin Berardi Bullonerie
Abrazaderas de tornillo sin fin: Las abrazaderas de rosca sin fin son de las más comunes y versátiles. Suelen consistir en una tira metálica perforada en espiral y un tornillo para apretar o aflojar la abrazadera. Estas abrazaderas son ajustables, lo que las hace ideales para aplicaciones en las que el diámetro de la manguera o el cable puede variar ligeramente.
Aplicaciones: Se utilizan mucho en aplicaciones de automoción y tuberías diversas, ya que ofrecen una buena resistencia a la presión y son fáciles de instalar.
Pinza para oreja Senga
Abrazaderas con oreja (simples o dobles): es una opción práctica cuando tienes poco espacio para instalar la abrazadera o en los casos en que hay que ponerla o quitarla rápidamente. Estas abrazaderas tienen una o más «orejas» que se aprietan con unos alicates para fijar la abrazadera alrededor de la manguera. Se utilizan mucho en el sector del automóvil para fijar mangueras pequeñas. No son reutilizables, ya que hay que cortarlas para quitarlas.
Abrazadera para cables Evereon Industries
Abrazaderas de apriete para hilos (simples o dobles): adecuadas para sujetar mangueras semirrígidas u onduladas, como las que se utilizan en los coches. También se pueden colocar en mangueras de gran diámetro.
Abrazadera de cierre rápido de Ojop Suecia
Abrazaderas de cierre rápido: Se recomienda utilizar abrazaderas de cierre rápido si el trabajo implica montar y desmontar mangueras con frecuencia. El sistema es sencillo: basta con apretar o aflojar el tornillo para ajustar la fuerza de apriete de la abrazadera y asegurar el montaje.
Abrazadera en T con tecnología de cierre King Seal
Abrazaderas tipo T: También llamadas abrazaderas de taqué, son fáciles de reconocer por la tira antifugas a la que están soldadas dos abrazaderas que alojan un perno y una tuerca de bloqueo. Están pensadas para mangueras más gruesas, ya que son muy resistentes. Sin embargo, tienen un rango de apertura muy limitado.